HUELGA EL DÍA 18

Hemos recibido en comunicado de:

CONFEDERACIÓN GENERAL DEL TRABAJO
Coordinadora Estatal de Telemarketing
Sector Telecomunicaciones
C Alenza, 13 bajo. Madrid. Tf: 91 554 72 05. Fax: [phone] E-mail: [e-mail]
www.cgt.es/telemarketing
Comunicado nº 16 de 10 de octubre de 2007

CGT ha convocado huelga legal el 18 de Octubre en los siguientes horarios:

1. Turno de noche: empiezan a las 0 horas y acaban a las 2 horas del día 18.
2. Turno de mañana: el horario de los paros es de 11 de la mañana hasta las 13 horas.
3. Turno de tarde: desde las 17 a las 19 horas.

Consultado nuestro vidente sindical (Raphel Mosqueo) nos informa de lo que ocurrirá el próximo día 18 con la huelga:

• Será un fracaso importante en la mayor parte de las empresas y plataformas.
• La negociación del convenio le importa un comino (o una mierda a vuestra elección) a la patronal. Tiene claro que deslocaliza servicios y su ocupación principal es deshacerse del máximo número de empleados en el menor tiempo posible. El retraso del convenio al menos hasta el final del presente año le permite maquillar sus cuentas el no incluir las hipotéticas subidas salariales en las cuentas de 2007
  
• La negociación del convenio importa poco a los trabajadores. Comienzan a tener claro que su futuro laboral no pasa por la profesión de teleoperador. El que no se ha marchado del telemarketing es porque no puede. Sus esfuerzos se centran en:
• conseguir que me despidan para sacar alguna indemnización
• conseguir un trabajo menos puteado, menos estresante o que ofrezca posibilidades de continuidad

 

Nos acongoja el análisis de Raphel Mosqueo pero luchar contra Corporaciones  del siglo XXI, con instrumentos del siglo XX , con trabajadores de baja militancia  social y sindical, con sindicatos que no generan confianza y con Autoridades Laborales y Políticas comprometidas hasta el fondo de su alma con la globalización no induce al optimismo.

Lo sentimos profundamente pero Amador Fernández-Savater ya lo dijo en el periódico Público:

ya no se nos dice “harás lo que quiero que hagas”, sino “serás lo que quiero que seas”.

Y nosotros obedecemos.